Geraldine Ramírez Valladares, de 31 años, trabajaba como conductora de la empresa UBER, pero el 11 de noviembre decidió emprender un viaje de vacaciones a Veracruz junto a su novio, a bordo de un automóvil Jetta, color rojo. Sin embargo, al llegar a un retén de policía en el tramo Xalapa-Cardel se perdió todo contacto con ella.
Su madre viajó hasta la capital del estado para interponer una denuncia ante la Fiscalía General del Estado por desaparición, pues desde el pasado 12 de noviembre no sabe nada de Geraldine, donde se encontró con los colectivos de búsqueda de desaparecidos, quienes le brindaron su ayuda.
Comenta que el último contacto que tuvo con ella fue cuando llego a Ciudad Cardel, “me habló como a las ocho y media de la mañana y me dice: mamita, llegué a Cardel, estoy en Cardel”, desde entonces se desconoce su paradero. Ya se cuenta con una ficha de desaparición, con folio ODI/ECA/A/543/2018. El día que Geraldine partió de casa en Tecámac vestía zapato de charol color salmón, pantalón de mezclilla azul y blusa rosada, mide un metro con 65 centímetros, tiene complexión delgada, cabello castaño oscuro, pecas en el pómulo y un lunar en la mejilla derecha.