Policías de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la Ciudad de México resguardaron a un bebé que era agredido físicamente aparentemente por su propia madre en calles de la alcaldía Álvaro Obregón.
Operadores del Centro de Comando y Control (C2) Poniente alertaron a los oficiales sobre una agresión infantil en la calle San Diego, de la colonia Pueblo de San Bartolo Ameyalco, donde encontraron a un menor de edad en riesgo.
Detienen a madre del bebé
En el lugar de los hechos, los oficiales encontraron a una joven, de 19 años de edad, en un posible estado de intoxicación, quien lesionó a un menor que llevaba en brazos.
Ante esto, los policías resguardaron al bebé de 25 días de nacido.
“Finalmente, los policías detuvieron a la posible agresora y, junto con el bebé, la presentaron ante un agente del Ministerio Público en la Fiscalía de Investigación de Delitos Cometidos en Agravio de Niños, Niñas y Adolescentes”, señaló la SSC.
En lo que la autoridad competente determina la situación jurídica de la madre del recién nacido, el bebé quedó a disposición de la Fiscalía para su atención médica y los trámites correspondientes.
Protocolo para juzgar con perspectiva de infancia
El Protocolo para Juzgar con perspectiva de Infancia y Adolescencia es un manual elaborado por la SCJN y la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) desde el 2012; sin embargo, este se reformuló en 2021 por los casos más recientes que involucran a menores de edad.
El protocolo considera que la niñez no es simplemente una fase de transición a la vida adulta, sino que “la infancia y la adolescencia son formas de ser persona”; por lo que no pueden ser definidas a partir de la dependencia o subordinación a la gente adulta.
Es por eso que en el primer capítulo del manual se abordan los criterios jurídicos aplicables para los casos en los que intervenga una menor de edad, con el objetivo de garantizar la asistencia necesaria al niño y a quienes cuidan de él.
Por su parte, el Consejo de Europa defina a la Justicia adaptada como: “sistemas de justicia que garantizan el respeto y efectivo cumplimiento de todos los derechos de los niños al máximo nivel posible, sin olvidar los principios (de participación, interés superior, dignidad y protección frente a la discriminación) y teniendo en cuenta el nivel de madurez y entendimiento del niño y las circunstancias del caso”.
MILENIO