Tras una denuncia vecinal, personal del DIF y la Guardia Estatal de Tamaulipas rescataron a tres hermanos menores de edad que vivían en condiciones deplorables.
El operativo se realizó el jueves a las 11:00 horas en un departamento oculto entre locales comerciales y casas de renta.
Vecinos alertaron a la policía sobre movimientos extraños en la vivienda.
Al ingresar los agentes encontraron una zona desgarradora: el piso y el baño estaban inundados de heces fecales, basura acumulada y comida descompuesta.
En medio del caos tres niños de 8, 6 y 3 años vestían harapos sucios y mostraban signos de falta de alimento.
En el piso, sobre un colchón yacía su abuela inmóvil con una herida abierta y sin ayuda médica debido a una cirugía reciente; así como la madre de los pequeños visiblemente abrumada por la impotencia.
La familia no solo luchaba contra el hambre y la enfermedad sino contra el abandono.
El DIF estatal confirmó que los menores fueron trasladados a un albergue, donde recibirán atención médica y apoyo psicológico.
Además, se presentó una denuncia formal para investigar el caso y determinar responsabilidades.
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