Juan José Omella, presidente de la Conferencia Episcopal Española, criticó la utilización política que -según él- está haciendo el gobierno socialista de Pedro Sánchez, respecto al aborto con la nueva ley que, entre otras cosas, permitirá que menores de 16 y 17 años puedan abortar sin el consentimiento de sus padres.
“Me pregunto, y es una pregunta maliciosa de cura de pueblo -ironizó-, si en estos momentos de crisis política saquen este tema no es para desviar de otros temas importantes. Esto es utilizar temas morales para desviar la atención de otros temas políticos”, aseguró Omella.
El arzobispo de Barcelona también criticó que en el debate de esta reforma no se tome en cuenta a la opinión pública y que al final sea el Parlamento quien decida.
Se manifestó en contra de que las menores de 16 y 17 años puedan abortar sin el permiso de sus padres, según uno de los principales puntos de la nueva Ley de Aborto que será aprobada el martes por el Consejo de Ministros.
“¿Para votar deben tener 18 años y para una decisión tan seria, no tienen que contar con el apoyo de los padres?”, se preguntó, “los hijos no son del Estado, sino de los padres”, señaló, quien insistió en que “son los científicos, y no la iglesia, quien tiene que decir cuándo empieza la vida” enfatizó Juan José.
Omella también tildó de “barbaridad” el hecho de que las menores de 16 y 17 años puedan abortar si permiso de los padres.
Además, salió en defensa de la posición religiosa sobre este tema: “lo que hay en el seno de la madre después de la concepción es una vida y es un ser humano”. “Nuestra gran proclama es la defensa de la vida, que es fundamental, en todos sus estadios (sic)”.
La nueva Ley del Aborto, entre otras cosas, también permitirá que las mujeres que padezcan reglas dolorosas puedan estar de baja tres días.
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