Coatzacoalcos, Ver. — Un golpe contundente al mercado ilícito de combustibles fue asestado en Coatzacoalcos, Veracruz, tras el aseguramiento de un complejo clandestino dedicado a la producción ilegal de diésel artesanal, nafta ligera, solventes, aceites tratados y combustóleo ligero. La operación fue dada a conocer este miércoles por el titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Omar García Harfuch.

Derivado de labores de inteligencia de campo y vuelos de reconocimiento coordinados por las fuerzas federales, se logró identificar la ubicación de la operación ilícita que funcionaba sin los permisos regulatorios correspondientes, representando además un serio riesgo para el medio ambiente y los ecosistemas locales por el manejo inadecuado de hidrocarburos.

En el operativo participaron de forma conjunta elementos del Gabinete de Seguridad, la Secretaría de Energía (SENER), la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), la Secretaría de Marina (SEMAR), la Fiscalía General de la República (FGR), la Guardia Nacional (GN), la propia Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, así como la Gerencia de Coordinación e Inteligencia Logística de Petróleos Mexicanos (PEMEX).

Durante la intervención, se cumplimentó una orden de cateo otorgada por un juez federal, que permitió a las autoridades ingresar al inmueble donde operaba la instalación ilegal. Como resultado del cateo, se logró la recuperación de más de 500 mil litros de crudo y la incautación de infraestructura industrial adaptada para la refinación y procesamiento clandestino de productos derivados del petróleo.

Sin precisar el lugar exacto donde fue asegurado este complejo clandestino, se asienta un golpe más al crimen organizado en el sur de Veracruz, región que desde hace años ha sido estratégica para las operaciones ilícitas de grupos criminales vinculados al tráfico de hidrocarburos.

El complejo clandestino estaba preparado para la producción y distribución ilegal de combustibles alternativos, destinados al mercado negro, lo que no solo generaba pérdidas millonarias para el Estado mexicano, sino que también implicaba riesgos graves por el manejo inadecuado de sustancias altamente inflamables y tóxicas.

Omar García Harfuch destacó que este tipo de operaciones son parte de la estrategia nacional de combate frontal al robo y tráfico de hidrocarburos, actividades que no solo afectan las finanzas públicas, sino que históricamente han financiado estructuras del crimen organizado en diversas regiones del país.

“El robo de combustibles sigue siendo una de las actividades más lucrativas de las organizaciones criminales, pero la coordinación interinstitucional está permitiendo desarticular estas estructuras desde su raíz”, señaló el secretario.

Hasta el momento, las autoridades no han informado sobre detenciones relacionadas con este operativo, sin embargo, se mantienen abiertas varias líneas de investigación para identificar a los responsables de la operación ilegal, sus posibles vínculos con organizaciones criminales y el destino final de los productos elaborados.

En la zona sur de Veracruz, particularmente en municipios petroleros como Coatzacoalcos y Minatitlán, la producción y tráfico de combustibles robados ha sido una constante durante años, aprovechando la vasta infraestructura energética y la colusión de diversos actores en el mercado negro.

Este operativo representa uno de los aseguramientos más importantes en lo que va del año dentro de la estrategia nacional contra el llamado “huachicoleo industrial”, fenómeno que ha evolucionado del robo simple de ductos a la instalación de refinerías clandestinas de gran capacidad, como la ahora desmantelada en Coatzacoalcos.

El Gobierno Federal reafirmó que este tipo de acciones continuarán de manera permanente como parte de la política de cero tolerancia contra el robo de hidrocarburos y el combate a las estructuras financieras del crimen organizado.

José Vargas