La liberación de Oscar Felipe N, presunto responsable del asesino de Miguel Sulvarán Xolo, fue resultado de las deficiencias de la fiscalía general del Estado, refirió el presidente de la Coalición Estatal LGBTTTIQ+, Benjamín Callejas Hernández.
En tanto, ahora, se tendrá que retomar la carpeta de investigación para reaprenderlo; por ello, dijo, se buscará que la autoridad federal, es decir, la FGR atraiga el caso.
"Y que se pueda iniciar un proceso administrativo a quien liberó al presunto responsable (...), lo que nos han comentado especialistas en temas de diversidad sexual es que ahí, lo que ocurrió, es que la fiscalía general del Estado liberó, porque malinterpretó, las medidas que dio la Comisión Estatal de los Derechos Humanos".
En entrevista explicó que había una recomendación de la CEDH en la que se acreditaron hechos de tortura contra el detenido.
Sin embargo, afirmó el activista, eso no implicaba que debía ser liberado, tal como lo valoró un juez.
"La CEDH dice que hubo violencia en la detención del presunto asesino, e hizo la recomendación de que, sí hubo violencia, pero eso no lo desvinculaba contra el asesinato. Entonces, la fiscalía mal interpretó la recomendación, porque son dos procesos distintos, y entonces ellos lo liberaron".
Indicó que al retomarse el caso no se debe minimizar el antecedente para detener al presunto asesino y, recordó que, "no se puede procesar dos veces a una persona por el mismo delito".
En ese sentido, Benjamín Callejas consideró que las deficiencias en las que ha incurrido la FGE en estos casos podrían corregirse mediante la creación de una Fiscalía Especializada en Crímenes de Odio, "obligaría a tener especialistas".
Finalmente, no descartó que se pueda fincar responsabilidades a quienes integraron la investigación de Miguel Ángel, "desafortunadamente en México y en el estado la justicia no es pronta ni expedita, lo importante (en este caso) es que la mamá no quite el dedo del renglón".
Sergio Lara