Orizaba, Ver.- La contaminación de la laguna del Chirimoyo se genera porque el municipio de Mariano Escobedo no entuba sus aguas residuales y terminan en este sitio.
En rueda de prensa, las autoridades municipales de Orizaba exhibieron la omisión de sus homólogos marianenses.
Hicieron saber que este problema se debe en gran medida a las descargas de aguas residuales provenientes del río Chicola, que llegan del municipio vecino, por lo cual, exigieron al Ayuntamiento de Mariano Escobedo cumplir con los compromisos a fin de lograr erradicar este problema de contaminación.
La síndica municipal, Michelle Fragoso Martínez, señaló que se firmó un convenio para atender la situación, pues recordó que el pasado 4 de febrero se llevó a cabo una reunión con el director de Obras Públicas de Mariano Escobedo, Alberto Huerta Matías, y el ingeniero Luis Fernando Sáenz, de Desarrollo Urbano.
Cabe mencionar que dentro de este convenio se establece la realización de una planta de tratamiento de aguas residuales para evitar la contaminación del arroyo del Novillero y, como medida provisional, la conexión al drenaje de Orizaba.
Fragoso Martínez afirmó que el documento fue enviado con anticipación al ayuntamiento de Mariano Escobedo y debía ser firmado este 13 de febrero por el síndico de ese municipio, Melquiades Vázquez, sin embargo, nadie se hizo presente.
Por lo que esta acción ha dejado entrever el poco interés que mantienen las autoridades municipales de Mariano Escobedo que representa Guadalupe Durán Alcántara, con el compromiso de tomar acciones en favor de la ciudadanía y el medio ambiente.
"Nosotros hemos cumplido con lo que se planteó desde el principio, pero del otro lado no hemos visto avances, ellos tienen que hacer lo que les corresponde, así como nosotros”.
Por su parte, el biólogo Aldo Huerta, de Ecología, Parques y Jardines, señaló que, como parte de los trabajos previos, se realizaron muestreos en distintos puntos del río Chicola, la descarga de Mariano Escobedo y la laguna del Chirimoyo, cuyos resultados evidenciaron que las descargas superan los límites máximos permisibles de la norma para cuerpos de agua.
Asimismo, dijo que no sólo representa un riesgo para la salud de los pobladores cercanos, sino que también afecta a la fauna del lugar, incluidas aves, peces y mamíferos.
Es de señalar que esta situación también ha sido notificada a la Procuraduría del Medio Ambiente (PMA) y a la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
Juan José Enríquez