Dejar el celular en la mesita de noche o incluso llevarlo a la cama es una costumbre que muchos hemos adoptado sin pensarlo demasiado. Ya sea para revisar mensajes, poner la alarma o simplemente ver algo antes de dormir, tener el teléfono cerca se ha vuelto parte de nuestra rutina nocturna, aunque esto podría estar interfiriendo más de lo que creemos con la calidad del descanso.
Si bien no se trata de un tema de radiación peligrosa, los expertos en salud advierten que el uso constante del celular antes de dormir, o incluso su simple cercanía, puede alterar los ciclos naturales del sueño, dificultar que conciliemos el descanso y hacer que despertemos sintiéndonos menos renovados. Tal vez sea momento de preguntarnos si realmente es buena idea dormir con el teléfono tan cerca.
¿Por qué no es recomendable dormir con el celular cerca?
Una de las razones por las que el celular puede afectar tanto el descanso como la luz que emite su pantalla. Esa iluminación, especialmente en tonos azulados, puede engañar al cerebro haciéndole creer que aún es de día, lo que complica que el cuerpo entre en un estado de relajación y se prepare para dormir.
Por eso, muchos especialistas en salud recomiendan evitar el uso del teléfono al menos una hora antes de ir a la cama. También sugiere dejarlo a una distancia prudente, idealmente de un metro o más, para que las notificaciones, vibraciones o simples ganas de revisar algo no interrumpan el momento de desconexión que tanto necesita el cuerpo por la noche.
Recomendaciones para mejorar tu sueño
Si últimamente te cuesta conciliar el sueño o sientes que las horas en la cama no te rinden como deberían, quizás sea momento de revisar tus hábitos nocturnos. Con algunos cambios simples en tu rutina diaria, es posible mejorar la calidad del descanso y despertar con más energía. A continuación te compartimos algunos consejos que pueden ayudarte:
- Despídete de las pantallas antes de dormir
La luz de los celulares, computadoras o televisores puede alterar el reloj interno de tu cuerpo, dificultando que concilies el sueño. Lo ideal es dejar de usarlos al menos una hora antes de acostarte, para que tu cerebro entienda que es momento de descansar.
- Un buen libro, tu mejor aliado nocturno
En lugar de pasar tiempo frente a una pantalla, opta por leer un libro. Esta actividad relaja la mente sin estimularla como lo hace un celular, y además puede ayudarte a conciliar el sueño de manera más natural.
- Relaja tu cuerpo con un baño tibio
Tomar una ducha caliente antes de dormir no solo es reconfortante, también puede ayudarte a liberar tensiones. El cambio de temperatura corporal posterior al baño envía señales al cuerpo de que es hora de descansar.
Evita comidas pesadas antes de dormir, ya que una digestión lenta puede interferir con la calidad de tu descanso. Lo recomendable es cenar algo ligero al menos dos horas antes de ir a la cama, para que tu cuerpo esté listo para relajarse.
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