Cada año, entre los meses de junio y agosto, diversos bosques en México se convierten en escenario de un espectáculo único: la temporada de luciérnagas. El fenómeno natural, resultado del ciclo reproductivo de estos insectos bioluminiscentes, atrae a miles de visitantes y se ha consolidado como una experiencia imperdible para los amantes de la naturaleza.
Uno de los sitios más populares para disfrutar de este fenómeno es el Santuario de las Luciérnagas, ubicado en los municipios de Nanacamilpa y Calpulalpan, en el estado de Tlaxcala.
En esta región boscosa, las luciérnagas ofrecen un espectáculo nocturno al iluminar el lugar con destellos intermitentes destinados a atraer pareja. Durante la temporada, familias y turistas recorren senderos controlados para observar este fenómeno en un ambiente sereno y protegido.
Además de Tlaxcala, otros estados, como Puebla, Estado de México y Michoacán, cuentan con zonas boscosas donde se puede apreciar la danza luminosa de las luciérnagas. Sitios como el Parque Estatal Campo del Agua en Puebla y el Santuario Piedra Canteada en Tlaxcala se han posicionado como destinos destacados por sus servicios turísticos que combinan actividades guiadas y gastronomía local.
La experiencia turística ha impulsado la economía local en diferentes regiones, pero también ha generado debates sobre la necesidad de proteger los ecosistemas donde habitan las luciérnagas.
Especialistas subrayan que el turismo debe ser controlado para evitar el impacto en el hábitat natural de estos insectos, ya que la contaminación lumínica, el ruido y la destrucción del bosque pueden afectar su reproducción.
Por ello, muchas comunidades han implementado regulaciones estrictas para garantizar la conservación, tales como la restricción del uso de cámaras con flash, la prohibición de lámparas y caminos exclusivamente peatonales.
El avistamiento de luciérnagas no solo ofrece un acercamiento a la naturaleza sino la oportunidad de fomentar el turismo sostenible en México. Los visitantes interesados en asistir a esta experiencia deben planificar con antelación, ya que los recorridos suelen tener cupo limitado y requieren de guías autorizados que aseguren la preservación del santuario.
Este espectáculo natural recuerda la riqueza de los ecosistemas del país y la importancia de proteger especies únicas que enriquecen el patrimonio biológico y cultural de México.
El costo para el avistamiento de luciérnagas en México varía dependiendo del lugar y el tipo de experiencia. En general, los precios pueden oscilar entre 270 y 2 mil 090 pesos mexicanos, o incluso más si se incluyen paquetes con hospedaje y otros servicios.
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