Orizaba, Ver.– La suspensión de eventos patrios en distintos municipios de Veracruz ha evidenciado el incremento de la violencia e inseguridad que se vive en la entidad, advirtió el vocero de la Diócesis de Orizaba, Helkyn Enríquez Báez.
El sacerdote señaló que esta medida ha encendido las alarmas sobre la eficacia del sistema de seguridad pública, pues cada vez son más los hechos delictivos registrados en diversas regiones del estado.
“Es un indicador de que existe violencia y, en ese sentido, también un tema de congruencia, puesto que no se debería arriesgar a la población si se sabe que hay una vulnerabilidad”, expresó.
Enríquez Báez subrayó que esta situación representa un desafío para las instituciones encargadas de brindar seguridad a los ciudadanos, cuya tarea es coordinar estrategias que permitan a las comunidades desarrollarse en paz y realizar sus actividades cotidianas sin riesgo.
“Creemos que es un acto de responsabilidad que las autoridades no expongan a los ciudadanos y, en ese sentido, esperamos que la situación en nuestro país vaya mejorando para que se construya un estado de derecho y un estado de paz”, añadió.
En las últimas semanas, municipios como Cerro Azul, Coxquihui y Zozocolco de Hidalgo —este último Pueblo Mágico del Totonacapan— anunciaron oficialmente la cancelación de sus festejos del 15 y 16 de septiembre debido a la inseguridad en la zona.
Ante ello, el secretario de Gobierno de Veracruz, Ricardo Ahued Bardahuil, informó que a los tres municipios se les brindará apoyo en materia de seguridad. Confió en que, con el respaldo de la Guardia Nacional y las Fuerzas Armadas, las celebraciones patrias puedan desarrollarse de manera pacífica en el estado.
Juan José Enríquez