Orizaba, Ver.- Integrantes del Frente de Acción Revolucionaria (FAR) se manifestaron este viernes frente al Palacio Municipal de Orizaba para denunciar una serie de presuntos abusos por parte de elementos de la Policía Municipal en contra de comerciantes informales.
Acusaron actos de hostigamiento, agresiones físicas y despojo arbitrario de mercancía en operativos que calificaron como "represivos" e ilegales.
Durante el pronunciamiento, Gaudencio Brito Flores, vocero del colectivo señaló que los trabajadores del comercio informal, cuya subsistencia depende enteramente de sus ventas diarias, son víctimas constantes de operativos violentos que, aseguraron, violan derechos humanos y constitucionales.
"¿Por qué se ensañan con personas sencillas, que lo único que quieren es trabajar de forma digna? La Constitución garantiza el derecho al trabajo, y ni el Estado ni el municipio pueden arrebatarlo. Es un derecho sagrado", manifestó Gaudencio Brito Flores.
El representante del FAR, dejó en claro que este tipo de prácticas no son nuevas, sino que se han venido repitiendo en administraciones anteriores sin que hasta ahora haya habido sanción alguna a los responsables.
Señaló directamente al titular de la Policía Municipal como el principal promotor de estos operativos, a los que calificaron como una forma de criminalizar la pobreza.
"Este grupo en el poder actúa como si fueran dueños de la ciudad, tratando a los ciudadanos como si fueran sirvientes", denunciaron.
Asimismo, cuestionó la falta de sensibilidad social por parte del actual gobierno local, al que acusaron de ignorar la precariedad y el desempleo que enfrentan cientos de familias orizabeñas.
Enfatizó que muchas de las personas afectadas son adultos mayores, mujeres y padres de familia sin acceso a empleos formales.
Al cierre de la protesta, el FAR hizo un llamado a la ciudadanía a solidarizarse con los comerciantes informales y a exigir al gobierno municipal el cese inmediato de estos operativos, así como una política pública que respete los derechos laborales y humanos de quienes integran este sector vulnerable.
Juan José Enríquez