El planeta está en constante cambio, en constante movimiento, en constante evolución y ante eso tenemos que actuar con resiliencia y responsabilidad. Con clara prioridad en el sector salud por obvias razones; pero, con miras a implementar medidas de contención que detonen el desarrollo económico y social lo más pronto posible.
Es aquí la importancia de estrategias de gobierno, organizaciones y sociedad civil, para generar esa confianza y sinergia entre los sectores. Existen agendas internacionales que han emitido reportes con sugerencias para paliar la situación actual. Es cuestión de ampliar la visión para identificar los planes más viables y de rápido resultado.
Algunos países están trazando la ruta de la mano con las oportunidades energéticas y sostenibles, con el objetivo de mejorar las condiciones del planeta. Empezando por la mitigación de CO2, en todos los espacios, ámbitos y sectores. Pues sabemos que una de las causas de las enfermedades está originada por las malas condiciones del aire.
Se deben generar soluciones, con alianzas, con transferencia de conocimiento y tecnología. Al final, lo único que queda es la huella que dejamos en este planeta. Las acciones de hoy se verán reflejadas en el futuro, así es que lo que hagamos o dejemos de hacer, impactará directamente en las siguientes generaciones.
Por: Ing. Alejandro Baizabal
Twitter: @alexbaiz