Llegó el segundo reporte trimestral de México, marcando una caída histórica en la economía de 18.9%. Impactado directamente por la pandemia, superando varios pronósticos. El subgobernador del Banco de México, Jonathan Heath, menciona que la recuperación a niveles de 2018 se estaría alcanzando entre 2023 y 2024. Hay que recordar que un factor adicional es la incertidumbre en las políticas públicas del actual gobierno.
Petróleos Mexicanos de igual forma lanzó su reporte trimestral, y aquí llama la atención que sus caídas fueron menores a las pronosticadas, generando pérdidas por 44 mil millones de pesos. Además, la Secretaría de Hacienda informó que en este primer semestre se derrumbaron los ingresos petroleros en 41.3%, la peor caída en registros. Recordar que el petróleo representa el 17% de los ingresos totales.
Con todo esto, y ante un planeta convulsionado por la pandemia, la crisis económica, pérdida de empleos, crecimiento de la pobreza, entre otras detonantes, se vuelve esencial la política pública y energética del gobierno. Está claro que necesitarán esa sinergia con todos los sectores, las inversiones se vuelven un factor fundamental. Y no solo eso, sino enfocar los recursos en las áreas rentables y productivas. No será fácil levantar el vuelo, pero con visión, voluntad y estrategias planificadas, será menos complicado. Y no solo pensando en petróleo, sino en una mayor apertura en el abanico energético.
Por: Ing. Alejandro Baizabal
Twitter: @alexbaiz
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