Quizá me recuerdes por una parte del discurso que di en el Senado de la República el pasado 12 de agosto en el marco del Día Internacional de la Juventud, relacionado a la falta de apoyo que ha tenido el deporte nacional por parte del gobierno. Quizás viste el video, lo compartiste y hasta te reíste con alguno de los memes que se viralizaron, pero… ¿y luego?, ¿qué sigue? 

Las redes sociales se han vuelto parte fundamental y estratégica de la comunicación social y política de nuestro acontecer. Sin embargo, también tienen la particularidad de que, pasadas unas horas o a lo mucho unos días, damos vuelta a la hoja y olvidamos la problemática que nos indignó por unos días.

El deporte mexicano está sufriendo una de las peores crisis en su historia, este año se ha programado el presupuesto más bajo para la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (CONADE), institución encargada de dirigir el deporte de alto rendimiento y la cultura física a nivel nacional. Han pasado 11 meses que llegó esta nueva administración y es día que seguimos sin conocer la nueva estrategia nacional deportiva a seguir.

El cierre de instalaciones pilares para el desarrollo de nuestros atletas de élite; la falta de metodólogos deportivos en el proyecto a venir de Tokio 2020; la poca apropiación de espacios públicos para el desarrollo del deporte recreativo; la nula promoción a la actividad y cultura física, la falta de inversión en la detección de talentos infantiles y juveniles; el ataque a las pocas instituciones clave y funcionales del deporte mexicano como la cancelación de la Olimpiada Nacional y Campeonatos Nacionales Juveniles, el cierre del laboratorio mexicano Antidopaje, así como otras más problemáticas aunadas, forman parte del escenario que tenemos los jóvenes en México.

En un país que encabeza las listas mundiales de obesidad infantil, muertes por enfermedades cardiovasculares y drogadicción en los jóvenes, es imperativo que el gobierno implemente políticas públicas que incluyan al deporte como un eje pilar del desarrollo de las estrategias de salud, educación, y cultura. Por cada peso invertido en Deporte, se ahorran hasta 30 en gasto de salud y combate a la drogadicción, es decir, que a la administración pública federal le conviene tomar medidas clave para incluir al deporte recreativo y a la cultura física como parte de la vida cotidiana de las y los mexicanos.

El deporte también sirve para forjar valores como la disciplina, el respeto, la solidaridad y la responsabilidad, entre otros. El deporte, a cualquier nivel y categoría, lo podemos visualizar como el verdadero camino para la transformación de la juventud mexicana. Requerimos promover su práctica dando una educación física de calidad y apoyando el deporte de alto rendimiento, pues es ahí donde nuestros jóvenes pueden probar la grandeza de sus frutos.

Lo que necesitamos hacer desde ahora es transformar el sistema deportivo mexicano mejorando los elementos administrativos, técnicos, normativos y tecnológicos de los responsables deportivos para un mayor aprovechamiento de los recursos. Para hacer real el cambio en la política deportiva mexicana, necesitamos todas y todos, ser voz presente de la causa y exigir a nuestros gobernantes que esto sea una realidad.

Para trascender de la viralidad, empezaré a escribir en este espacio para compartir los temas de la agenda nacional deportiva y de la juventud mexicana. Deseo que todos, como sociedad civil, conozcamos la situación actual de nuestro país, nos adueñemos de ella, creemos debate y estemos informados para poder seguir luchando por nuestro fin común ¡Un México honesto y próspero!

Por Guillermo Ruíz Tomé

(Guillermo es un ciudadano mexicano de 19 años, seleccionado nacional de triatlón, estudiante del quinto semestre de la carrera de derecho en la facultad de derecho de la UNAM, subcampeón nacional 2019, representante de México en diferentes competencias internacionales.)